Pasar tiempo al aire libre es bueno para el cuerpo y el alma. Todos sabemos eso. Pero han salido recientemente algunos datos a tener en cuenta. Los mismos se relacionan con los beneficios de disfrutar de la playa. Veamos si la ciencia considera lo mismo que nosotros, cuando estamos frente al mar…
El mejor espacio…
La sensación de paz que se experimenta en la playa ahora lleva el nombre de “espacio azul”. Esto es lo que los científicos denominaron como el efecto da la combinación de los sonidos del agua y los olores relajantes en el cerebro. Es por eso que este espacio, basta para que uno se sienta a gusto, pero de una manera hipnótica, pongamos por ejemplo en la Costa Atlántica.
Pero no es sólo la cabeza, lo que se relaja en las arenas del mar, sino una cambio en la forma en que el cerebro reacciona a su entorno. Esto permite, entonces, sentirse revitalizado, feliz y relajado.
¿Cómo afecta el espacio azul?
Lo hace de cuatro maneras, las cuales explicaremos a continuación:
La playa potencia la creatividad
Si sos de l@s que que detestan la rutina, y no te sentís creativo, entonces la playa es el lugar para cambiarlo. Ya que los científicos creen que la solución es que disfrutes de la arena. Estar en el espacio permite despejar la cabeza y abordar proyectos o solucionar problemas de una manera más creativa. Es que estar al lado del mar, permite desencadenar una sensación de calma que te permite desconectar de todo y enfocar en lo que vale la pena.
Ir a la playa reduce el estrés
El agua sirve de cura natural, para los factores estresantes de la vida, porque está lleno de iones positivos que generan que te puedas sentir a gusto. No solamente nadando, sino mojándose los pies, esa sensación de relajación se puede experimentar.
En la playa podés reducir los sentimientos de depresión
Siguen las cosas buenas de ir a la playa, de estar parad@s frente al mar. Como es proporcionarse cierto alivio a los sentimientos de depresión. Es gracias al sonido hipnótico de las olas junto a la vista y los olores de la playa, que se logra un estado meditativo. Así, despejar la mente y reflexionar sobre la vida, lejos del caos cotidiano se vuelve un bálsamo de buen ánimo.
Pasar tiempo en la playa cambia la perspectiva de la vida…
Y esta a su vez, se modifica para mejor. La naturaleza ha sido un factor en la vida sana y feliz, y la playa -particularmente- es muy buena para el alma.
Por último, les dejamos esta hermosa y semejante manera de ver el mar, por parte de la poetisa uruguaya Idea Vilariño: