«Pe, pe, pero… ¿Cómo que van a cobrar?» Y bueno, sí. Tampoco tanto, no se asusten ni se enojen, que tienen una buena finalidad. Acá te contamos todo.
Los parques no son gratis
Ya que saben la noticia, ahora le desarrollamos la información. Lo primero que tienen que saber es que los valores serán de 250 pesos para los turistas extranjeros, 150 pesos para los visitantes nacionales, 50 pesos para las personas radicadas en Misiones y 25 pesos para los jubilados,
tal como lo informó el Ministerio de Turismo de Misiones, en el pasado mes de julio.
El cobro tiene como objetivo lograr beneficios para todos los pueblos de la zona, entre los que se destacan San Pedro, el Soberbio y Aristóbulo del Valle. También tiene un fin estadístico y de monitoreo del ingreso de los visitantes a las áreas naturales.
¿Vieron? Nada del otro mundo y cierra por todos lados.
El mecanismo operativo de gestión de control y cobro de entradas está a cargo de Turismo, IPLyC, y Gestión Estratégica, estableciendo un sistema de atención al visitante en el acceso de los dos principales destinos de naturaleza para los visitantes que llegan a la provincia, después de las Cataratas del Iguazú.
Salto Encantado
Por la Ruta Nacional 14, a 12 kms.de Aristóbulo del Valle, se accede a la Ruta Provincial 220 y luego de 4 kms se encuentra el ingreso al Parque Provincial Salto Encantado. Que es lo mismo a decir que se ingresa a un paraíso verde.
Cuenta con una superficie total de 13.227 hectáreas, atravesadas por por el arroyo Cuñá Pirú, conformando así una de las áreas protegidas más importantes de la provincia.
El gran salto, atractivo principal del Parque, fue visto por primera vez en junio del año 1936. Y su origen se explica por la erosión que durante mucho tiempo efectuaron las aguas del arroyo Cuñá Pirú, lo que generaron esta caída de agua de 64 metros de altura.
Parque provincial Moconá
Este parque cuenta con 253.773 hectáreas, y está dentro de la Reserva de la Biósfera Yabotí, en la región centro-este de Misiones, 330 kilómetros de Posadas.
Los Saltos del Moconá regalan a quienes los visiten (y ahora paguen) un espectáculo único en el mundo, gracias a una falla geológica sobre el río Uruguay, entre las desembocaduras de los arroyos Pepirí Guazú y Yabotí (del lado Argentino), y los ríos brasileños Serapiao y Calixto.
Deben ir a conocerlos y, de paso, ayudar a los pueblos aledaños.