Mendoza es el epicentro de la industria vitivinícola argentina. Allí se produce un gran porcentaje del vino del país y cuenta con más de 150 bodegas abiertas al turismo.
Es en Mendoza, la provincia del sol, donde vas a poder ser testigo de la elaboración del vino, la belleza de sus lugares y viñedos, recorrer bodegas, realizar degustaciones y todo lo que forma parte de La Ruta del Vino.
4 bodegas para visitar en la Ruta del Vino
La ruta del vino en Mendoza es uno de los viajes más elegidos por turistas de todo el país, por eso en este post les dejamos información importante para que puedan disfrutar del epicentro del enoturismo nacional recorriendo 4 de las bodegas más importantes de la zona.
Bodega Lagarde
Ubicada en Luján de Cuyo, Mendoza, Bodega Lagarde es reconocida por ser una de las más antiguas que dieron el puntapié internacional del vino en argentina. Fue fundada en 1897 y adquirida en 1969 por la familia Pescarmona, con Sofía y Lucía Pescarmona, tercera generación de la familia, como líderes.
En manos de la familia Pescarmona desde la década de 1980, en los últimos años Bodega Lagarde abrió sus puertas al turismo, con una deliciosa propuesta gastronómica en su restaurante Fuego y una atractiva oferta turística en este bodega que forma parta de la ruta del vino.
Bodega La Azul
Bodega La Azul está ubicada en Tupungato y pertenece a la zona del Valle de Uco. El paisaje que se puede apreciar en el recorrido hasta la bodega es increíble, convirtiéndola en una de las preferidas de la ruta del vino.
En La Azul, además de ofrecerse increíbles almuerzos, se destaca por ofrecer vino gratis. Cada paso se acompaña con un vino diferente y la verdad es que el maridaje es perfecto.
La bodega cuenta con viñedos propios que permiten realizar un excelente control de todo el proceso de elaboración. Todo este trabajo termina en una botella cuyo único fin realmente es hacerle pasar a sus visitantes un momento agradable. Actualmente se producen líneas de vinos que dan la juventud propia de la bodega como Azul Malbec.
Bodegas Trapiche
Otra opción para seguir el recorrido en la ruta del vino es Bodegas Trapiche. Allí se puede comenzar con una visita guiada a la bodega y degustación. Almorzar con maridaje de las mejores etiquetas; caminar entre las viñas con la compañía de patos, ovejas, vacas y llamas; brindar mirando el atardecer en la montaña.
Esa es la propuesta renovada de enoturismo por un día de Bodegas Trapiche, ideal para un viaje en familia o con amigos. La misma se encuentra ubicada en Maipú y su construcción de estilo renacentista data de 1912; es considerado uno de los íconos de la arquitectura vitivinícola argentina.
El recorrido por la bodega es a fondo, para conocer de cerca el proceso de la uva desde su llegada de la viña, el estrujado, la maceración en los tanques, el paso por barricas y el embotellado.
Bodega Achával Ferrer
En la privilegiada zona de Agrelo, Luján de Cuyo, ubicada sobre la Ruta 7, a solo 20 minutos de la ciudad, Achaval Ferrer abre las puertas a los visitantes para que conozcan sus viñedos rodeados de sauces llorones, jardines y olivos. La bodega fue construida en un imponente espejo de agua bajo los parámetros de la arquitectura sustentable.
Entre las principales actividades están el recorrido por la finca, las degustaciones a medida (de diferentes añadas, verticales o diversidad de ejemplares) y el almuerzo por pasos en el restaurante. Sin duda alguna, una alternativa más que especial para agregar a la ruta del vino.
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