Chubut ofrece muchos de los mejores paisajes del país. Hoy nos vamos a centrar en uno de ellos, pero sobre todo en una de las actividades que se pueden hacer allí: pesca de trucha en Lago Puelo.
Este espejo de agua (¡qué hermosa expresión!), que se ubica en el noroeste de la provincia, se ha convertido con el tiempo en un lugar obligatorio para conocer. Dentro del Parque Nacional y Reserva Lago Puelo, que recibe hasta 20.000 turistas en los veranos, pero miles y miles durante todo el año. Muchos de ellos, quienes gustan de pescar trucha en estas aguas, que son ideales para ello.
Lago Puelo conserva reales paraísos pesqueros que los amantes de esta práctica, eligen cada vez más. Porque es posible una amplia variedad de preferencias, niveles de aptitud y modalidades. Esta zona es protectora de la naturaleza regional y cuenta con reglamentación adecuada de la disciplina.
La pesca de trucha
Los pescadores aficionados pueden y deben disfrutar de diferentes clases de trucha: Marrón, Arco Iris y de Arroyo. Ayudado por los afluentes de este curso (Río Azul, Río Epuyén y Río Turbio) permiten ampliar la fertilidad en estas partes, por lo que la captura de grandes ejemplares es segura.
Con una superficie de 45,95 km² y una longitud de 21 km, este lago tiene buena parte de su perímetro al que no se puede llegar a pie. Salvo el margen norte y su extremo norte del brazo Desemboque, muy protegido por los cerros linderos.
Tiene su máximo punto en la desembocadura del río Epuyen y el momento para visitarlo es… ¡Ahora! Después, en temporada alta para el turismo, la actividad se resiente un poco.
Estos lugares permiten la práctica de la pesca deportiva en las modalidades Spinning, Fly Cast y Trolling. Siempre, siempre con la mejor posibilidad, que es partir desde el muelle de Lago Puelo a bordo de un semirígido. Allí la aventura es una garantía, donde se corona con la posibilidad de sacar truchas que van desde los 500 gramos hasta los 2 kg.