Si quieren caminar y disfrutar el Valle de Punilla, pasear por el Camino de los Artesanos es algo que tienen que realizar. Entre Villa Giardino y La Cumbre, hay 12 kilómetros que unen tiendas que ofrecen lo mejor del arte regional.
El comienzo
El camino intercala naturaleza y el trabajo del hombre, el paraíso para los artesanos. Primero se fueron a una casa y a medida que fue creciendo, se fue armando el camino, entre los que hacían panes caseros, manufacturas, dulces y los municipios cercanos que donde se corrió la voz.
La idea del camino, es que el turista pase a los talleres y vea cómo se logran los productos. Con ello pueden valorar más lo que van a comprar y el trabajo de los artesanos.
Descansá y alquilá cabañas en Villa Giardino.
El recorrido
Un tesoro natural de Córdoba, que es acompañado por bijouterie, piedras semipreciosas, cestería, cuadros, esculturas, tejidos a mano en lana de oveja, comidas y tantísimas cosas más…
Lo primero que puede disfrutarse son los dulces y licores caseros como también la variedad de vinos, quesos de vaca, de oveja y de cabra y las tablas de quesos y fiambres. Son cientos, miles de turistas que frenan sus automóviles para bajar y dejarse llevar, no solo por lo que ven, sino por lo que transmite este paseo.
También podes quedarte unos días en Villa Giardino, sus 1.100 metros sobre el nivel del mar regalan tonalidades de verde en todas las sierras, un bulevar lleno de flores, al igual que el reloj floral, calles arboladas y plazas por lo que la transforman en “El jardín de Punilla”. Este reloj fue hecho por los festejos del Bicentenario, donde sus 12 metros de diámetro decoran la Casa de Cultura Municipal.
Allí es posible ver y en cantidades el cosmos, que es la flor emblemática de Villa Giardino con sus tonalidades violeta, blanca y rosada. Que como lo que hacen las manos de los artesanos, solamente se puede reconocer por la belleza.