El los últimos años los avances tecnológicos, han logrado provocar cambios en la manera de adquirir servicios como transportes, alojamientos y pasajes.
La forma tradicional de llamar por teléfono, de planear y reservar con anticipación para muchos, es algo del pasado. Hoy en día las plataformas digitales permiten tener acceso inmediato al servicio turístico que busques.
Estos son algunos de los cambios que debemos afrontar constantemente. Si bien para muchos turistas y empresarios son favorables, otros consideran que resultan una amenaza para el turismo tradicional. El mundo hotelero por ejemplo, pese a su buena predisposición para complementarse con nuevas propuestas tecnológicas o digitales, sufre las consecuencias de que el turismo elija cada vez los alquileres temporarios, por sobre estadías en hoteles.
Una de las realidades con las que se enfrentan dueños de hoteles, es que los turistas son cada vez más jóvenes, por lo que buscan gastar menos dinero, y alojarse en un lugar que sea cómodo, sin mayores lujos. Plataformas digitales como la nuestra, Alquiler Argentina, son algunas de las principales causas de las rivalidades generadas.
Entre las principales causas por las que el turismo prefiere alquileres temporarios, se encuentran las ofertas, promociones, comodidades y precios hasta casi la mitad de lo que costaría un hotel con los servicios básicos.
El nuevo perfil del turista que hace uso de la web es el de una persona que no viaja para pasar el tiempo en una habitación de hotel, disfrutando de la piscina, una película en su habitación o masajes en un spa. Es una persona que busca pasarla bien, sentirse cómodo en el alojamiento elegido y sentirse como en su propia casa.
En Argentina, Airbnb también es popular pero tienen muchos problemas legales. En Buenos Aires la aplicación se viene utilizando desde hace 5 años, pero el mayor crecimiento se dio entre 2015 y 2016, con un 50% más de huéspedes. Desde entonces, las voces críticas empezaron a subir el tono, por ejemplo una búsqueda de hospedaje para una noche en los barrios de Montserrat, Palermo y Almagro en la aplicación, lanza alternativas que cuestan entre un 12 y un 40 por ciento menos que los hoteles.
El conflicto con los dueños de hoteles se centran en una serie de regulaciones y exigencias que estos deben cumplir, mientras que los dueños de casas o habitaciones que ofrecen hospedaje temporal, no deben hacer. Ricardo Boente, una de las autoridades de la cámara AHRCC, denuncio que los hoteles deben cumplir con exigencias que van desde la construcción hasta la seguridad de los clientes, formalidades y obligaciones como derechos de autor por tener televisores en las habitaciones, IVA, impuesto a las ganancias, al cheque, Ingresos Brutos, cargas sociales, municipales y convenios colectivos de trabajo, que Airbnb no cumple.
Si bien los tiempos modernos y avances tecnológicos son importantes, es necesario encontrar un balance entre lo tradicional y novedoso con el fin de que el mundo del turismo siga siendo una de las mayores fuentes de trabajo e ingresos para el país.