Hace unos años se vienen detectando cambios en el comportamiento del turista, y esto está relacionado a muchos factores. Uno de los cuales, tiene que ver con el aumento en la búsqueda de alquileres temporarios, el cual surge a raíz de una nueva necesidad del turista que busca vacacionar sin resignar la comodidad del hogar, el confort y la privacidad.
Ante esta situación, y el aumento considerable de la demanda turística, cada vez son más las propiedades que se incorporan en el circuito. Pero lo cierto es que trabajar en este rubro no es una tarea fácil, y además contar con propiedades aptas para alquilar requiere una importante inversión.
¿Gasto o inversión?
En algunos casos, quienes se incorporan a este rubro, tiene una propiedad en alquiler y lo hacen para genera un ingreso extra. En otros casos hay quienes se dedican exclusivamente a esto y cuentan con muchas propiedades. Lo cierto es que en cualquiera de estos casos se requiere de una mínima inversión para comenzar.
En principio, el gasto implica equipamiento. Si queremos brindar un buen servicio, el alojamiento necesita contar con comodidades básicas como muebles, artefactos de cocina, TV, climatización, y aunque hay muchos que no lo brinden, la ropa de blanco y ropa de cama es fundamental.
Quienes salen de vacaciones no siempre tienen la posibilidad ni las ganas de traer un bolso con sabanas y toallas.
Después, a medida que pase el tiempo y se vaya recuperando la inversión, se le pueden ir agregando comodidades extras para mejorar el servicio.
Luego hay que tener en cuenta gastos fijos básicos como la luz, gas, expensas e impuestos. Y en algunos casos, se agregan servicios como internet y cable que si bien puede generar un gasto extra, hoy en día para el turista pueden ser factores excluyentes a la hora de alquilar.
Por otro lado, limpieza, lavandería y mantenimiento son gastos que hay que tener en cuenta cada vez que llega y se va el huésped. Estas tareas las puede realizar uno mismo o en algunos casos es necesario contar con empleados.
Consejo: brinda el servicio de limpieza diario como un servicio opcional y que lo pague el huésped.
Además si el alojamiento brinda servicio de desayuno o restaurante, hay que pensar en el gasto de alimentos y en mozos en el caso de que haya un comedor destinado a ello. También se puede ofrecer este servicio como opcional y cobrarlo aparte.
A la hora de pensar en empleados pueden ser personas destinadas a tareas de mantenimiento, limpieza, cocina, etc. pero también tareas administrativas como reservas, gestión de mail, teléfono, o para recibir a los huéspedes y solucionar cualquier inconveniente que surja.
No te olvides de la publicidad
Finalmente y no menos importante es la inversión en publicidad, hay quienes prefieren la publicidad tradicional, pero en este rubro, lo aconsejable es invertir en publicidad on-line, debido a que hoy en día estar presente en internet es fundamental. Hay diferentes alternativas como las redes sociales, posicionamiento en buscadores, páginas web, centrales de reserva como Booking que son intermediarios en las reservas cobrando un porcentaje por cada concreción, o portales de alojamientos temporarios como Alquiler Argentina que cobran una cuota anual y no intervienen en las reservas.
Como en todo negocio, los gastos al principio pueden resultar altos, pero son inversiones que a largo plazo dan sus frutos. Lo más importante es trabajar duro y llevar a cabo un seguimiento detallado de cada una, para lo cual muchas veces es necesario contar con el apoyo de alguien que maneje estas herramientas.