Lejos quedó la época en que los perros no podían ir a las playas. Aquel momento, donde los «pichichos» eran mal vistos, pese al cariño de todos. Ese cambio se ve y se palpa en Pinamar. Por eso en esa localidad, con el perro a la playa…
En Pinamar, se puede ver lo que se quiso por mucho tiempo: mascotas en la playa. Y lo mejor, a toda hora. Es que en muchas familias, los perros son un integrante más.
Hoy en día se los ve por todas partes, jugando y correteando, mientras las familias disfrutan del mar y de la arena. Como ellos. Lo mejor, es que al al resto de los turistas no parece molestarle. Sino, muy al contrario de lo qu se esperaría, se entretienen con ellos y los acarician.
Lo más interesante, es que pese a que existe una ordenanza, que dispone un horario de playa para animales de compañía en los meses comprendidos entre diciembre y abril (#4811/16), la misma señala que no pueden estar allí entre las 9 y 19 horas, es decir las mejores horas. También obliga a los propietarios a tenerlos con correa, llevar libreta sanitaria, ponerles bozal en caso de que puedan ser peligrosos y usar una bolsa higiénica para recolectar heces. Es decir lo lógico. Salvo el tiempo que se puede estar con ellos, en plena playa…
Pese a la prohibición, lo más importante son los cuidados a tener y respetar, también si es que a alguien le molesta.
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Para tener en cuenta…
Ya que las autoridades, no se han puesto en posiciones estrictas, frente a una realidad que no se puede cambiar (los perros conviven con nosotros en las playas), por eso ayudamos con algunas recomendaciones.
El uso del collar es importante
Si bien ya lo mencionamos, el hecho de que lleguen nuevos perros al lugar donde habían otros, puede ser puntapié para un «conflicto perruno», por así decirlo. Frente a los que «vienen a robar» e invadir el territorio, las agresiones (como mordidas) pueden ser frecuentes. Por eso el bozal, que pusimos arriba y explicamos mejor acá, es importante. Se pueden sacar cuando ya se sientan familiarizados con la zona.
Buscar un veterinario local
Es muy importante. No hace falta que pase nada, pero es mejor prevenir y conocer a quien nos puede ayudar, en caso de urgencia.
No sobreexigir físicamente a las mascotas
Ellas también van a descansar, además de disfrutar. Sobre todo, sabiendo que la arena es un terreno difícil y la sobrecarga de trabajo puede derivar en lesiones traumatológicas, como en molestias de articulaciones, tendones o músculos.
Pueden aumentar enfermedades en la playa
Por eso, hay que prever antes del viaje, que tengan al día las vacunaciones y desparasitaciones correspondientes. Ya que al estar en contacto con otros animales, aumenta el riesgo de transmisión de enfermedades infectocontagiosas, como así también parasitosis externas e internas.
Al volver de la playa
Es necesario que realicen duchas en donde se estén alojando. Ya que con ellas, se elimina el resto de salitre que produce irritaciones en los perros. Sobre todo en las zonas de piel sensible como el vientre. También es importante limpiar los ojos para evitar conjuntivitis y los oídos con alcohol.
