Tigre es la mejor escapada cuando de relajarse se trata. Por eso acá, te traemos 3 imperdibles opciones de este lugar. Para que vayas y pienses solamente en disfrutar.
Pasear por el Delta
Vamos al Delta. Es casi obligatorio navegar esas aguas que no solamente nos llenan de tranquilidad, sino de paisajes bellísimos. Sobre todo la parte denominada Los Bajos del Temor. Allí, los atardeceres son impagables.
Allí vamos a ver el cielo parecerse al fuego mismo y notar como este lugar es de los más elegidos, por aquellos que gustan de los buenos momentos. Ya sea en kayaks o embarcaciones que se acoplan al lugar y evitan los ruidos, ustedes podrán ser testigos de semejante postal.
Lo mejor de todo, es que este lugar está a minutos de la Ciudad de Buenos Aires. Allí, y llegando de todas partes del país, la geografía cambia para bien. No hay ruidos, no hay stress. Lo que sí hay es una naturaleza que se adueña del momento y de las mejores sensaciones en los bajos.
La tranquilidad también se vive en estos alojamientos temporarios en el Delta del Tigre.
Puerto de Frutos
Entre los atractivos existe uno que es un clásico. Hablamos del famoso paseo de compras por el Puerto de Frutos. Es el lugar donde se entrecruzan el antiguo comercio de alimentos de los primeros habitantes de las islas, con nuevos locales de decoración para el hogar.
Son tres dársenas, donde la primera está llena de barcazas con troncos de álamos. Los mismos tienen destino final como la confección de cajones para estibar frutos.
La segunda dársena, se compone de lanchas techadas, con los laterales descubiertos donde se comercializan los frutos más variados y coloridos. También se consiguen las plantas típicas del litoral. La última dársena consta de paseos de compras más armados. Son negocios de decoración para el hogar, muebles y productos regionales.
En el lugar también, hay varios restaurantes para almorzar en los mediodías de los fines de semana, en los que se lleva a cabo este paseo.
Museo del Mate
Como dicen, el mate para el argentino es la excusa para juntarse, es compañía, es reflexión, es un símbolo muy nuestro, es tradición. Y en el Tigre, se encuentra su museo donde reliquias y rarezas se mezclan con el recorrido por la historia del mate.
A pocos metros de la Estación Fluvial y la Estación Tigre TBA, se encuentra esta casa típica del lugar, que por dentro es un disfrute de punta a punta.
El Museo del Mate es “único en el mundo” y cuenta desde los comienzos cuando fue una costumbre del litoral y cómo fue pasando de mano en mano, de boca en boca hasta ser la infusión nacional, más importante. Piezas rústicas, seguidas de mates de metal, de plata, con mucha decoración, más austeros… Están todos, que a la vez hablan de la historia a medida que muestran sus cambios y evoluciones.
Ir hasta este lugar se torna, entonces, en una cita ineludible. Como cuando te dicen: «Te espero con mates». Y más si es en el Tigre.
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